Latino Quotidiano – TG Festival Il tuo Latino Quotidiano
Lui morì per malore, moglie e figlio invalidi per fame e sete. Furono trovati senza vita in casa a Macerata, verità da autopsie
Roma, 07 maggio 2022 – È l’autopsia a svelare la tragedia della solitudine e dell’isolamento dietro la morte, scoperta lo scorso settembre a Macerata – dopo la chiamata di una parente insospettita dal silenzio nel quale cadevano le sue telefonate – di un padre di 80 anni, di una madre di 76 anni disabile in seguito ad un ictus e del figlio della coppia di 54 anni, rimasto da tempo invalido a causa di un incidente stradale.
Il caso era rimasto finora un mistero. Si pensava ad un avvelenamento magari dovuto a delle esalazioni dato che non c’erano segni di violenza nella villetta di famiglia dove madre e figlio hanno continuato per qualche tempo a sopravvivere – senza nessuno che si occupasse di loro – dopo la morte di Eros Canullo, il capofamiglia che pensava a tutto il necessario per moglie e figlio. Anche lui trovato morto insieme ai suoi cari. Solo che è stato lui il primo a morire colpito da un malore improvviso e fulminante, mentre moglie e figlio – hanno rivelato gli esami autoptici – si sono spenti a poco a poco, di inedia, ogni giorno un pò più vicini alla fine. La morte di Eros li aveva privati dell’unica ancora di salvezza e accudimento. Era solo l’anziano pensionato, un tempo imprenditore, ad occuparsi infatti della moglie Angela Maria Moretti, e del figlio Alessandro, tutti insieme vivevano – circondati da un triste silenzio – nella casa in zona San Croce dove sono state trovate le loro salme.
Una tragedia che aveva gelato la città marchigiana otto mesi fa, con il ritrovamento dei tre corpi senza vita, e che assume adesso contorni ancora più drammatici dopo i risultati degli accertamenti eseguiti dal medico legale Roberto Scendoni e dal tossicologo Rino Froldi durante l’autopsia effettuata l’8 settembre e depositati nei giorni scorsi. Nessuna traccia di avvelenamento da monossido di carbonio o di altre sostanze tossiche nei corpi di Eros, Angela Maria, e dello sfortunato figlio Alessandro: il padre è venuto a mancare per primo, secondo quanto emerso dagli esami, per un accidente subitaneo e letale, mentre la moglie e il figlio sono stati consumati dalla privazione di cibo e acqua. Eros Canullo era stato un imprenditore e abitava con la moglie, che era logopedista per l’Anffas, e il figlio, che aveva frequentato anche gli scout, ed era rimasto segnato pesantemente da un grave incidente stradale. Progressivamente la famiglia si era chiusa in se stessa, allontanandosi anche dai parenti. Due anni fa Angela Maria aveva avuto un ictus che l’aveva bloccata a letto. Il marito si occupava di tutto con il supporto, all’occorrenza, della Croce Verde, ma solo per le emergenze. Una situazione di difficoltà crescenti, segnalate anche da un amico e dai sanitari, in cui l’anziano assisteva i due famigliari disabili; la morte repentina e non annunciata di Eros – con il suo pesante carico di preoccupazioni – ha tolto ai familiari ogni tipo di assistenza e nutrimento. A settembre una sorella di Angela Maria, che vive a Milano, dopo aver cercato per settimane di contattare la sorella, ne aveva segnalato la scomparsa. Da lì il sopralluogo nella villetta e il ritrovamento dei tre corpi in avanzato stato di decomposizione.
Una historia de abandono vergonzoso: fantasmas en la vida y después de la muerte
Èl murió de enfermedad, su esposa e hijo discapacitados por el hambre y la sed. Fueron hallados sin vida en casa de Macerata, verdad de autopsia
Roma, 07 de mayo de 2022 – Es la autopsia que revela la tragedia de soledad y aislamiento detrás de la muerte, descubierta el pasado mes de septiembre en Macerata – tras la llamada de un pariente sospechado por el silencio en el que caían sus llamadas telefónicas – de un padre de 80 años , de una madre de 76 años que quedó inválida a raíz de un ictus e hijo del matrimonio de 54 años, que llevaba tiempo inválido en un accidente de coche.
El caso había permanecido hasta ahora un misterio. Se pensó en un envenenamiento quizás por humos ya que no había signos de violencia en la casa familiar donde madre e hijo sobrevivieron durante algún tiempo -sin nadie que los cuidara- tras la muerte de Eros Canullo, el jefe de la familia que pensó en todo lo necesario para su esposa e hijo. Él también fue encontrado muerto junto con sus seres queridos. Excepto que él fue el primero en morir azotado por una enfermedad súbita y fulminante, mientras su mujer y su hijo -revelaron los exámenes de autopsia- morían paulatinamente, de inanición, cada día un poco más cerca del final. La muerte de Eros los había privado de la única ancla de salvación y cuidado. Solo el anciano jubilado, otrora empresario, cuidó de su esposa Angela Maria Moretti y de su hijo Alessandro, todos viviendo juntos, rodeados de un triste silencio, en la casa del barrio de San Croce donde fueron encontrados sus cuerpos.
Una tragedia que había congelado la ciudad de Las Marcas hace ocho meses, con el hallazgo de los tres cuerpos sin vida, y que ahora adquiere contornos aún más dramáticos tras los resultados de las investigaciones realizadas por el médico forense Roberto Scendoni y el toxicólogo Rino Froldi durante el autopsia practicada el 8 de septiembre y archivada en los últimos días. Ni rastro de envenenamiento por monóxido de carbono u otras sustancias tóxicas en los cuerpos de Eros, Angela Maria y del desafortunado hijo Alessandro: el padre falleció primero, según se desprende de los exámenes, por un repentino y letal accidente, mientras que su esposa y el niño fueron consumidos por la privación de alimentos y agua. Eros Canullo había sido empresario y vivía con su mujer, que era logopeda de Anffas, y su hijo, que también había frecuentado los scouts, y quedó muy marcado por un grave accidente de tráfico. Gradualmente, la familia se había retraído en sí misma, alejándose también de los parientes. Hace dos años Ángela María tuvo un derrame cerebral que la tuvo encerrada en la cama. El marido se ocupaba de todo con el apoyo, si era necesario, de la Cruz Verde, pero solo para emergencias. Una situación de creciente dificultad, relatada también por un amigo y los trabajadores de la salud, en la que el anciano atendía a los dos familiares discapacitados; la muerte súbita y no anunciada de Eros -con su pesada carga de preocupaciones- privó a la familia de todo tipo de asistencia y alimento. En septiembre, una hermana de Angela Maria, que vive en Milán, después de intentar contactar a su hermana durante semanas, denunció su desaparición. De ahí la inspección en la vivienda y el hallazgo de los tres cuerpos en avanzado estado de descomposición.
